Pros y contras de crear juegos interesantes

Crear un juego de mesa es una aventura. Hacerlo interesante, con sentido, narrativa y alma… ya es otra cosa.
En Culture Games apostamos por juegos que no solo entretengan, sino que conecten con la cultura, el territorio y la memoria. ¿Fácil? Para nada. ¿Gratificante? Sin duda.

Hoy queremos compartir, sin filtros, los pros y contras de crear juegos interesantes, al menos desde nuestra experiencia como editorial pequeña, independiente y peleona.

PROS

1. Tocas temas que importan

Cuando eliges contar historias reales, tradiciones o episodios culturales, conectas con personas que valoran lo que haces. No estás lanzando otro juego más: estás creando algo que representa a una comunidad.

2. Tu juego tiene identidad

Los juegos interesantes se diferencian. Tienen personalidad. Tienen fondo. Pueden ser modestos en producción, pero quedan en la memoria de quien los juega.

3. Se crea conversación

Un juego bien pensado invita a hablar después de jugar. Sobre lo que pasó, lo que aprendieron, lo que sintieron. Y eso para nosotros vale más que mil reseñas.

4. Satisface a nivel creativo

No hay nada como ver a alguien emocionarse con una carta, una decisión o una escena que tú diseñaste con cuidado. Crear con propósito te devuelve mucho más de lo que cuesta.

CONTRAS

1. Es difícil encajar en el mercado

Si tu juego no es lo que “está de moda”, cuesta más llegar a tiendas, a distribución y a eventos. Hay que luchar por cada espacio, visibilidad y oportunidad.

2. La documentación lleva mucho tiempo

Crear juegos con fondo histórico o cultural no es rápido. Requiere investigar, validar fuentes, hablar con expertos. Y ese tiempo no siempre se ve… ni se paga.

3. No todo el mundo lo entiende

Hay quien busca solo mecánicas, rapidez o “cosas épicas”. Un juego narrativo, cultural o local puede no entrar por los ojos si no hay una educación lúdica detrás.

4. La producción es limitada

Hacer juegos en tiradas pequeñas, con cuidado editorial y arte a medida, cuesta más por unidad. Y eso complica competir en precio frente a las grandes editoriales.

¿Y entonces? ¿Vale la pena?

Para nosotros, sí. Crear juegos interesantes es más lento, más difícil y a veces más frustrante…
Pero también más profundo, más emocionante y más humano.

Porque al final del día, no estamos vendiendo cartas:
estamos contando historias, dando valor a lo nuestro y creando momentos reales entre personas reales.

Y eso, no tiene contra que lo tumbe.

Regresar al blog